La arboleda sagrada se refiere a bosques sagrados elegidos minuciosamente donde la gente del pueblo se reunía para realizar todo tipo de ritos basados en la mitología celta cuya Diosa regente es Nemetona, esta Diosa presidia cada una de las ceremonias. Se creía que el poder de los dioses se encontraba místicamente en cada uno de los arboles del bosque y por ello cada árbol era consagrado o simbolizaba una virtud. La gente no se reunía solo para celebrar rituales, sino que se reunían para meditar, bailar las danzas sagradas y algunas veces incluso para realizar sacrificios.
La popular expresión toquemos madera procede precisamente del carácter sagrado con el que los pueblos celtas envolvían al árbol, el cual constituía un símbolo de buena suerte, los druidas celtas tras la muerte, pensaban que se encarnaban en el árbol que estos aun tras su muerte, aun velaban por la salud se su pueblo.
me encantan las historias CELTAS, son muy apasionadas y sobre todo muy misticas¡¡¡¡
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