Mikulás

Hungría, como la mayoría de los países tiene su propio Papá Noel que va por todo el país en un trineo tirado por caballos acompañado de dos ayudantes: un ángel bueno que se encarga de distribuir regalos a los niños de buen comportamiento, y Krampus, un duende malvado que se ocupa de castigar a aquéllos que han sido malos. Es muy parecido a Santa Klaus, solo que viste los trajes rojos de un obispo, una mitra roja en su cabeza y un bastón. La noche del 5 de diciembre los niños dejan colgadas sus botas en la ventana para que Mikulás deje sus presentes. Suele dejar una bolsa llamada Mikulás csomag con dulces, nueces, manzanas, chocolates y algún pequeño juguete. Los que han sido malos tendrán en sus zapatos un virgács, que son unas ramitas de arbusto pequeñas, unidas mediante algún tipo de lazo